Rosales de nuestro jardín y patio
Hola,
en esta entrada vamos a dar un breve repaso a los rosales que tenemos en nuestro jardín y patio.
En la época de invierno les hemos hecho una poda más fuerte para tener una buena brotación y hemos eliminado todos los tallos finos que no nos iban a dar flor.
Como ya sabemos a cada rosal lo debemos de podar de varias maneras.
A los trepadores les hemos quitado todas las ramas pequeñas y los tallos pequeños de las inflorescencias.
A los arbustivos de gran porte los habremos rebajado un tercio aproximadamente su tamaño, dejando una estructura fuerte en la que hemos tenido una buena brotación y floración en primavera.
A los floribunda que son de porte mediano y pequeño les habremos quitado el 50% aproximadamente de las ramas dejando una estructura fuerte y en todos ellos siempre debemos de dejar la ultima yema de la rama que hemos podado mirando hacia fuera de nuestro rosal. Si no lo hacemos así las ramas nuevas irán hacia el interior del rosal armando un lío espantoso.
Como sabemos qué rosal tenemos, gracias a Internet y con el nombre del rosal sabemos que tipo son y cómo los tenemos que podar.
Llego el verano y la gran mayoría de las flores se nos han pasado y tenemos la duda de que hacer con ellos.
La gran mayoría de los rosales modernos y algunos de los antiguos, nunca llegan a formar fruto. Después de la floración lo que queda de flor se cae y rápidamente vemos que se empiezan a formar ramas nuevas que nos van a dar flor en unas semanas.
En cambio en los rosales que el fruto empieza a crecer, debemos de quitarlo por que si no no nos volverán a dar más flor.
Hay variedades que se cultivan por su fruto en otoño e invierno pero son los menos: Rosal Moyesii, R. Geranium, R. Macrophylla, R: Rugosa y un largo etc..
Estas podas de mantenimiento que son relativamente fáciles de hacer, son las que nos van a garantizar una buena floración.
No nos olvidemos que debemos seguir abonando los rosales, sobre todo después de los meses de calor, ya que con la bajada de temperatura el rosal empieza a brotar de nuevo y podemos tener una buena floración al final del verano y bien entrado el otoño.
Durante los meses de primavera y verano es bastante frecuente que nuestros rosales hayan tenido o tengan alguna plaga dichosa. Las más frecuentes son:
Los Pulgones que tenemos en primavera cuando el rosal esta tierno. Por regla general se combaten bien con productos específicos para ellos.
El Mildiu, que es un hongo que ataca las hojas del rosal debilitándolas y dejándolas con un color blanquecino. Es pesado de quitar pero con varias aplicaciones las hojas nuevas salen limpias y las afectadas se quedan con un color feo. Hay que fumigar la tierra ya que las esporas se quedan en la tierra y pueden volver a colocarse en las hojas. Hay que utilizar Cobre para combatirlo.
El Black spot, o puntos negros, es otro hongo muy típico de los rosales y se puede diferenciar muy bien ya que son puntos negros que se dan en las hojas. Es menos agresivo que el Mildiu y se combate mejor. Combátelo con un antihongos general.
El Rose Rust o Rolla es otro hongo que es muy agresivo con los rosales. El envés de la hoja se vuelve de color naranja, como si fuese oxido del hierro y hay que tratarlo con un fungicida especifico para ello. Funciona bastante bien cobre o derivados del cobre en pulverización.
Por ultimo la Araña roja, que en climas muy secos suele aparecer y nos deja las hojas con un color feo y finalmente se cae al suelo. Un buen acaricida es la solución, dándole 3 aplicaciones cada 10/15 días según el producto que estemos utilizando. Es aconsejable que con la manguera reguemos esos rosales afectados, ya que el agua lo va lavando y los ácaros la odian.
Procurad que siempre se recojan las hojas afectadas que se han caído al suelo, ya que estas nos pueden volver a infectar nuestro rosal más adelante.
A disfrutar de vuestros rosales!!!